¿SIGUES ESPERANDO A TU PRÍNCIPE AZÚL?

Dicen que la bella durmiente espero a su príncipe por años  y que finalmente éste llegó, la beso y se quedó con ella.  Walt Disney tenía que vender felicidad y NO realidad.  Y desde que los finales felices estuvieron a la venta todo el mundo buscó su demanda.  

Si dicen que Jean-Paul Sartre veía “el final feliz” como algo momentáneo y aburrido porque significa el fin de todo el cuento. Mucha gente cree que la felicidad es eterna y yo pienso que solo existen los momentos felices.

Dicen que el camino hacia la felicidad esta  lleno de tragedias, eso es realmente interesante.  Mientras más buscas tu príncipe azul, iras encontrando más sapos.

Para vestir santos creo que nadie, ahora hay para todo, para un roto un descocido. ¿Ya buscaste bien tu otra mitad? Seguro lo dejaste en tu casillero, en la maletera o en el diccionario, quizás ahí lo encuentres si buscas la palabra realidad.

El dichoso príncipe azul se ha vuelto un recurso no renovable. Ya no los fabrican igual que en los tiempo de Rapunzel y Blancanieves. Si gustas, puedes esperar y hacerte la dormida pero la verdad que los hombres te verán solo como comida.

La persona ideal, ese ser imaginario que paso por varias capas en Photoshop. "Príncipe azul" fue como una marca en venta, tan exitosa como la coca cola y que tratamos de encontrar como el tesoro bajo la equis. 

Ya nadie quiere defectos. Que es muy alto que no alcanzas, o muy bueno que aburre. Demasiado hablador o bastante torpe al bailar. Te dobla la edad o tiene el tatuaje de su ex en la espalda. Parece que todos buscan y creen que existe, una edición limitada de príncipe azul que aun no se haya agotado, un rotundo remate con cero stock.

Felicitaciones al producto estrella de Walt Disney  en verdad rompió todos los records y aun se sigue buscando materia prima para fabricarlos nuevamente.   Todas esas exquisiteces, que buscamos en otra persona no es más que el signo de la inmadurez y un capricho difícil de complacer.

El gordito de al lado puede ser tu príncipe azul, pero te dejas llevar por lo superficial. Ideas e imágenes que nos vende la publicidad. Puras ideas sobrevaloradas, malinterpretadas. ¿Queremos tener pareja o modelo?  ¿Queremos querer a alguien o exhibirlo en vitrina para que le tomen foto?

Es la verdad, no sabemos lo que queremos porque no sabemos apreciar las verdaderas cosas. Honestidad, respeto, cariño, virtudes, valores y todas esas cosas que debemos ver, pero lo superficial es tan potente como un rayo de sol que nos impide ver más allá de una cara bonita. Unos buscan deslumbrarse en vez de conocer más a la persona que tienen al lado.

Aun así ¿Sigues esperando a tu príncipe azul? Creo que te equivocaste de paradero porque por aquí no va a pasar. O quizás si llegue pero se destiña con el tiempo, nada es perfecto y si crees encontrarlo, poco a poco se irán descascarando las capaz de “azul” y encontraras que esa perfección es solo a primera vista y que era necesario escarbar más y encontraras una persona de carne y hueso.

Lo mejor que puedes hacer  es dejar de buscarlo, porque aunque no lo creas llegara uno y no será de color azul pero te aseguro que se convertirá en TU Príncipe, si te tomas el tiempo de conocerlo de verdad. 

#G