miércoles, 30 de noviembre de 2011

EL OTRO


Estaba medio enfermo,  decaído y constipado, con una fiebre de sábado por la noche, y aun asi abuse de mis células sanas para maltratar los huesos en una salida donde le robe horas al fin de semana nocturno. Definitivamente era mejor tomar la píldora o ibuprofeno, pero salí y eso es la alfombrita de bienvenida a la fatalidad. Aquella vez perdí mi V, porque quería tres x, no se culpa a nadie. Quizás solo a una si a una, a una copa de Martini.

Luego de eso aprendí a que beber puede ser divertido sin terminar siendo el mejor amigo de un inodoro publico dentro de una disco. Dando bailes de tubo a cualquier extraña o incluso extraño. Zapateando como si el piso te exigiera masajes. Todo el humo termina en tu nariz. Y se atora en tu garganta cada beso ajeno.  Cada sonrisa es falsa, cada momento está siendo medido por un radar donde eres el objetivo. Eres carne fresca, porque eres la inocencia en disfraz.  Las bocas se contorsionan solo para hablar de ti y de tu simbólico ascenso y seguirá hablando hasta que llegue tu precipitada caída. Les gusta. Les gusta cuando subes cuando bajas, cuando te quedas ahí abajo, cuando vuelves a subir pero en tu nueva etapa. La recuperación.

Dicen que el rechazo es el nuevo comienzo.  Así comencé. Desde lo más debajo de mis cimientos, y aquí estoy una leyenda andante con una lista negra envidiable. Pero todo cuesta, todo costo.  Se unieron varias piedras para poder cruzar ese rio profundo lleno de pirañas. Y cada una de ellas tenia nombre: envidia, hipocresía, impaciencia, excesiva ternura, poca tolerancia, poca sensatez, cojuda, tonta, lenta, sordomuda, ciega e incluso ingenua. Pero contrate un tiburón y se las devora todas, llegando así al otro lado del agua.
Esa noche se repitió y pude cambiar la historia de aquel sábado, la temperatura en mi termómetro estaba disparando mercurio por todos lados. Me acordé de la pasada y corregí. Recordé: como se dice? Mmm hay otra forma de llamarlo… El extra? La trampa?  La salida de escape? La escalera auxiliar para bajar del incendio de una relación que siempre intenta surgir de entre las cenizas, o en buen castellano se podría decir que se llama ser el otro.

El amante perverso frio calculador, el malo del cuento que seduce pero en realidad es seducido por la inquietante negativa de la prohibición. Convirtiendo al otro en hilos en la garra de un gato. Así empecé siendo el otro, sin saber que lo era, así con mi fiebre de 40 mis cabellos endurecidos por el gel, así de terco por salir, así de tonto por caer.

El amigo con plus o con beneficios. Como un bonus track en un CD anglosajón. Donde en ciertos casos el acuerdo se firma sin tinta, ni papel sino con el silencio cómplice donde el TLS (Tratado de libre sexo) queda tácito con una sonrisa picara y disforzada; un acercamiento mudo que se convierte en bulla en la cama. No es necesario dejar en claro nada. Todo está en el aire, y si no los respiras así, te mueres. No hay lugar a reclamos porque esto es “sin compromisos, ve y donde quieras suelta tu pelo riso”. No hay ataduras.

Pero, que pasaria o que sucede cuando una de las partes se involucra demasiado y boom le explota el corazon. Hace su aparición el "crush im in love. Oops i did again. Bye bye game welcome reality". La situación es incómodamente tierna, peligrosamente dulce pero fatal,  porque la otra persona te ve como un amigo con quien puede tener casual sex, solo eso, no hay otro final para ese cuento. Terminando al otro lado de la barra usando un puchero en los labios que no se ve bien.

Watch out! Do not open your heart, yet.

Estas en peligro de extinción. La otra persona al detectar tus sentimientos  puede optar por conseguirse otro punto. Analogía:  Adiós exclusividad-Bienvenida abstinencia.  Y  creo que a la mayoría no les gusta esa chica con artritis y gafas fondo de botella llamada Manuela.

El otro, así de sencillo. Porque no es que no les gustes, es que no eres lo que quieren. Porque están queriendo a otro porque siempre han querido a otro y digamos que eres como el tejido que entretiene al gato mientras regresa el ratón.

Entonces la lección se aprendió, y volví a salir después de una etapa de blackout. Renovado. Maduro, avispado, canchero,  entonando: gimme more, it’s Gercar bitch. Me recargue de argumentos y palabras claves que me abrieron muchas cajas fuertes. Ya no me dolia ni los talones de tanto caminar de un lado al otro sin saber que hacer. Ahora mi anatomía funcionaba en perfecto acorde con mi nueva mentalidad alterada. 

Ya no me afecta salir a la calle y ver a los “afortunados” de la mano, antes hubiera querido coger una katana de Hattori Hanzō, prestada de Kill Bill, y cortar esos dedos.

Pero el mundo gira y no lo podemos detener. O nos sentamos a esperar que todo pase, o nos movemos para alcanzar la velocidad de la luz. Lo importante es seguir, caminando rápido o lento. Pero no dejar que el sedentarismo caiga de sorpresa a tocar nuestra puerta. Salir es la salida, vivir es el antídoto. Yo estaba enfermo, decaído, triste y medio resfriado; pero sabía que la noche me llamaba. Pero salí , aprendí, disfrute, sufrí y supere al maestro.  Ahora yo tengo el as bajo la manga, y sin poker face.  El otro ya no, Sorry baby, I'm not your Bitch.

#G
Anoche, Gercar lo dijo



sábado, 26 de noviembre de 2011

LA PRIMERA VEZ ES LA ULTIMA



Qué pasa cuando se te acaban las primeras veces. Cuando todo se vuelve “más de lo mismo”. Arruinas todo lo mágico del final feliz con el comienzo de la realidad.  El vivieron “felices para siempre” se rompe en mil pedazos como el espejo más lujoso y te condena a años de años no de mala suerte, sino de realidad amplificada.  El punto final viene con la moraleja en letras pequeñas. Por cada capítulo que se cierra se abre uno nuevo, siempre.  Todo continua y no se detiene porque te da la gana.

¿Se acuerdan de sus primeras veces?

Están los primeros besos. Algunos inocentes, negros, sin intención, sexys, estimulantes, dulces, con sabor a guayaba o solo papaya. No solo se comparte un cariño, se transmite un estado de ánimo. Por otro lado esta los besos de amantes. Son tan necesarios que activan los BPM (beats per minute)  a gran escala. Están dispuestos a chantajear la decencia con la condición de dejar a la prohibición jugar en campo blando. Pero entre nos, les confieso que no recuerdo mi primer beso. No recuerdo con quien, no recuerdo donde, no recuerdo si quería besar o no, no recuerdo si fue rico, lindo, sabroso, feo, ordinario, fugaz, falaz, terco o reprimido. Recuerdo los besos posteriores, a partir del veinteavo o veinticincoavo. No hay día en que a modo terapia sicoanalítica, me sumerjo en mi mente opaca, pero no hallaba la escena. Se quedo ahí inundada entre mis desastres cerebrales. Espero haya sido bueno.

Sin embargo seguí buscando otras primeras veces y se convirtió en la obsesión de una mente sin recuerdos, me encontré desesperado tratando de encontrar respuestas… ¿Dónde quedó mi primer beso? ¿Dónde quedó mi primer abrazo? ¿El primer polvo de diamantes que brilla los ojos hasta los dioses? No recuerdo ni una de las tres. El primer beso lo olvide, el primer abrazo, imposible de deducir, pero uno espera recordar su primera vez, porque es LA PRIMERA vez. Me avergüenza admitir que no recuerdo cuando fue. Nuevamente cerré los ojos, me adormecí, e intente recordar...pi pi pi pi ... Cero.

Hay otras primeras veces. Para mí no hay muchas, me falta capacidad de almacenaje, mi cabeza tiene un disco duro tipo disquete, y con antivirus inservible. Mis gigabytes son números de una cifra, y siempre se me descompone la PC con la resaca,  remojo el microchip con la bebida, y quedó en blanco como casete que le graban encima.

Sin embargo, recuerdo la primera vez que vi a un muerto. Era mi tío, en su ataúd, tenía 4 años, pero lo recuerdo en medio de la sala entre cuatro velas gigantes que jamás se derriten. Y muchas flores alrededor como un jardín lúgubre, el cajón era plateado y tenía esos ornamentos en metal. No había nadie, solo yo escondido desde la entrada y el muerto. Quería acercarme pero me daba miedo. Tenía miedo a que se enojaran conmigo por no obedecer. Me dijeron que no entrara a la sala y fue lo primero que hice cuando me dejaron solo.

Y la primera vez que fui a la escuela también la recuerdo porque me la contaron, casi le destrozo a rasguños la falda a mi madre. Dice que llore hasta toser, gritaba hasta despertar a un grillo. Al final ante tanta ternura me regreso a casa y me cambio de colegio para que yo estuviera más cerca. Me contaron eso, me lo contaron, por eso lo recuerdo, pero mi Primera vez nadie me la ha contado. 

La primera vez que gane un concurso,esa si me la sé. El premio de 500 dolares por escribir una historia que tenía sentido porque era manco de ganas pero use mi corazón, y escribí con el ventrículo surdo y a veces con el diestro.

Se viene a la mente, mi primer cine, la primera cita, la segunda y luego perdí la cuenta. Como olvidar mi primer bronceado fallido termine en el hospital por sobre exposición solar. Mi primer diente que cayó.  Pero existe algo que no quiero recordar, mi primer rechazo…Mi medula se quedaba sin nervios porque estos se me escapaban hasta Urano. No me quedaba tranquilo hasta entretener mis inquietos dedos en el piano o en la hoja.

En la vida existen adicciones, al trabajo, al estudio, a las metanfetaminas, a las dietas, a los autos, a los pastos… y  al ser amado equivocado.

Paradoja: alguien nos quiere, lo tenemos pero le dejamos ir porque pensamos que volverá. Paradoja: queremos a alguien que no nos quiere. Le deseamos como la última gota en el desierto, pero nos mira como una espina entre muchas rosas. Y nos duele. Recuerdo mi primer dolor, mi primera estreches de corazón. Recuerdo su primera mirada tan hiriente, su primera ausencia. Aun cuando pude salvar mi dignidad, seguí con fe inagotable, ahora que lo veo desde atrás, me siento tan torpe “cómo es posible que haya querido dar tanto sin recibir nada”. Mi propio pepe grillo me lo decía “no lo hagas”. El pobre grillo, nunca lo escucho, siempre de un solo soplido lo echo de mi hombro.  Hasta ahora a lo único que prestó atención, a lo único que escucho es el deslizar helado de un absolut vodka cranberry, recontra Soviet! Pero mis ojos rojos mi barbas largas mi abstinencia me hacia un adicto a su presencia, no importaba si estaba cerca o lejos bastaba mirarle para saber que aun puedo mirarle. Neurótico mi coco, entendió muy tarde que si no hay reciprocidad no puedes pasarte la vida entregando ilusiones sin delivery. So, mande mis bichitos de l’amour a Moscu para que de ahí los transborde hasta Siberia de paseo una buena temporada y se congelen hasta que dejaron de ser cálidos como lo eran.

Recuerdo mi primera llamada de emergencia, porque estaba desmoronándome, pero no había nadie al otro lado de la línea. Recuerdo mi primer intento de --------.  Pero soy tan cobarde como para actually do it.  Qué más da, recuerdo mi primera página en blanco, y recuerdo que ese episodio tuvo un final bonito, más no feliz. Pero lo bonito es mejor que “el feliz” si lo pienso una y otra vez hasta que todo lo que pienso pierde sentido. El tango se baila de a dos, pero ni modo, tengo que respirar “buenos aires”, ventilar todos mis sesos. Hacer un brainwash hasta lavar el último rastro de estupidez. En la actualidad estoy tan en paz, conmigo, que quisiera que abundara en mí para poder coger una canasta y hacer de la ciudad un campo donde la reparta a todos, al mismo estilo de un candy raver. Full peace,love,emotion. Ya no dudo en huir dejando toda responsabilidad, tan solo para darle a mi cabeza un descanso necesario, eso es fugitivo, viajar a reencontrarme, haciendo de mi cuento un eat pray love.

Podemos prescindir de nuestras primeras veces, siempre y cuando ellas reaparezcan en una versión superior a la original pero sin perder esa magia que emana del detalle. Hay que seguir, son solo etapas. Para lograr cualquier cosa es necesario una primera vez, sea buena o malo, aunque dicen que si algo malo sale es mejor para no volver a hacerlo. Yo aprendo. Yo hago de esa pésima primera vez, la ultima.  Hay más, mucho más. Si creen que el dolor de corazón o desamor es horrible, entonces nunca les han sacado una muela juicio, eso sí es dolor y poca felicidad.  La primeras veces efímeras y tontas, son una barrera, porque te llevan a un final aparentemente feliz pero solo para la foto, porque luego “el vivieron felices para siempre”, está lleno de hijos, deudas del colegio, loncheras, propinas, suegras, etc.

Por si las moscas, yo decidí no contar más las primeras veces, porque no quiero que queden en “únicas”, si es lo bastante buena, que perdure, por los siglos de los siglos. A todos nos gusta contar, nos gusta de alguna manera dejar algo en suspenso para que pregunten por más. Todos ahora bailan y se mueven como Mick Jagger, yo elijo ser un filme en blanco negro, tan mudo como el buen Charles Chaplin,  conmover como un chavo del ocho saliendo de la vecindad con el palo y su trapo. En letras rojas No alardear de una primera vez.

La primera vez es la última. Luego se convierten en imitaciones piratas, revendidas y hasta ofertadas. Clones que se limitan a existir tratando de ser el original, wannabes. Y la última vez también tiene su guion aparte, porque nunca sabemos cuándo es la última vez. Siempre juramos, que jamás volveremos a hacer algo. Pero terminamos escupidos por el cielo no dos ni tres , decenas de veces.  Karma es la piedra en el zapato, toma fuerza y forma de justicia divina y a manera universal su imperio contraataca, terminando lastimándome el orgullo, pecho, brazos piernas, vasos sanguíneos que explotan dejándome seco hasta de las ganas. A estas alturas que la fuerza me acompañe, porque es lo más nórdico ser atacado por la cucharada de tu propia medicina y a al menos yo ya no quiero volver al lado oscuro. 

#G
Anoche, Gercar lo dijo

viernes, 11 de noviembre de 2011

EL PERRO DIENTES DE SABLE


Rafaela tiene el irremediable don de congregar gente en un punto inigualable, su hogar. Esta prohibido faltar porque ahí esta prohibido prohibir. No es la otra dimensión, es solo la entrada  a...  Una vez abierta te succiona la cordura, lógica, entre otras ciencias  y se quedan en la bolsa de la aspiradora para un viaje sin boleto de retorno. Nunca sabemos dónde terminara el episodio, es mejor desconocer como la noche acaba, es mejor no especular. Felizmente toda la vida hemos terminado con una historia bajo el brazo para las generaciones próximas. Y aquel remoto sábado del que les vengo a hablar, no fue la excepción.

Como lo dije, faltar es una falta grave, sin embargo aquella noche solo éramos ella y yo. Porque juntos somos quizás el dúo dinámico mas necio del planeta, una especie de gemelos fantásticos pero muy distintos, que al golpe de puños nos transformamos en “tu pagas la ida y yo la venida" (taxi)… al final Yo pago ambas porque ella pierde la conciencia. Cada domingo en la madrugada que le sigue al agotado sábado, ella le pertenece solo al alcohol… bueno estoy exagerando pero Rafaela es un poco de eso. Aunque aquel sábado del que les vengo a hablar  fue una vez de excepciones. 

Estábamos tristemente sobrios, porque nuestras billeteras no estaban del todo alegres. Llegamos al bar de siempre, con las ganas de nunca, esperando encontrar adeptos o cómplices de siempre. Ella y yo eramos solo un par (y una buena mano se gana con más cartas). Nos encontramos con Rosaura y ella nos hizo la taba.  La mesa de un abracadabra se puso abundante de vasos rabiosos de espuma helada, za za za. Aunque yo no tome casi ni un litro, se me vislumbraba ido, como que perdido. Mi cuerpo estaba ahí con ellas pero mi mente estaba en una misión “Hallar la chica del correo electrónico misterioso”.

Nos encontramos con amigos de Rosaura,y la cara de ella cambio. Lo presentía, ella también estaba en una misión: “Conquistar al chico que conoce del trabajo”, pero ese es otro cuento. Prosigo. Rafaela entro en zona de bostezo igual que yo, los ánimos estaban decayendo a pique,  le conté sobre mi persona misteriosa, y ella entendió el porqué de mi cara de palo. Se supone que yo no saldría esa noche pero la chica misterio al contarme que iría al mismo bar a donde yo voy siempre, no me quedaba de otra,  tenía que hacerle un asalto a mi agenda y destruir mi domingo por las mañanas.

Todo estaba bien,pero si se supone que la iría a conocer en persona, porque estaba tan desconcertado… por la sencilla razón que 10 minutos despues de entrar al bar  ella mando el siguiente mensaje de texto : "Estoy llegando con mi ex “en plan de amigos”… No me moleste para nada, pero ... pero.... OK Si Me Moleste!. En verdad ni se porque me enfade cuando me dijo eso, no somos nada, y quizás me precipite a que estábamos en algo, pero en realidad estábamos en cero. Éramos amigos, solo eso, A M I G O S. En ningún momento se acordó un previo a "estar" como pareja. Pero yo soy el rey de los huevones, y para variar entrego todo por adelantado incluyendo el sentimiento. Y siempre termino trasquilado, sin nada más que mi propio abrazo…

Al modificar mi agenda modifiqué mi excusa horas antes (La excusa que usan todos para salir cuando no los dejan salir) y si mi madre adorada quería que me quedara por fin un fin de semana en casa después de mucho tiempo solo para ayudarla con unas cajas extra pesadas de la azotea, estaba muy equivocada. Me había escurrido por mi puerta, atravesé como culebra por la suya hasta la puerta principal,  salí directo al nocturno. 

Y como les contaba estábamos en carencia de espíritu, sin embargo Rosaura estaba haciendo suya la noche,  aparentemente el chico terminaría en su bolso. Bien por ella, en verdad nunca supe que paso después…En eso, sucedió, la chica misteriosa (ni tanto misteriosa) paso por mi costado de la mano de un tipejo que media dos centímetros por debajo de mi estatura ( si!, tengo buen ojo y lo escanee de pies a cabeza). Y se la llevaba al mini bar al fondo de la pista. Con la sola mirada los rastree en posición y estaban a un ángulo de 45° desde mi vértice posicional, entonces bastaba hacer un reojo para vigilarlos, lo cual viene siendo totalmente un absurdo tamaño del mundo, ella podía hacer lo que quiera pero me jodía que no lo hiciera conmigo. 

Ella quería conocerme, no quedamos en encontrarnos nunca, solo comentamos que saldríamos cada uno por su lado, quizás sabia que yo iría al bar pues siempre le hablaba de ese lugar, tal vez pretendía que la viera con él. Importa poco mis teorías. Lamentablemente mi estupidez siempre le vence el brazo a mi tranquilidad y sin sentidos con harta dosis de osadía, descolgué a Rafaela de mi hombro que casi me lo babeaba de lo “divertida” que estaba, y me acerque en tomas como de película hacia la chica misteriosa, no se que pretendía hacer, no tenia ni un solo pedazo de idea sobre lo que le iba decir. Pensé en un “hola…” “hey” estaba pobre de frases, me senti como un burro amarrado a la pista de baile dudando en que decir, mientras le dejaba esa tarea a mi cerebro, mi cuerpo era una masa que se desplazaba mas y mas, su objetivo estaba ya casi cerca, como si fuera un suspenso que se prolongaba con los nervios paralizados, mi dedo índice derecho aterrizó en su espalda,  y con mi cara de oso machucado, ella giró como un disco, tan veloz que ni me percate en mi pestañeo, y solo dije    "Ups sorry flaca, me equivoque de persona”…

Me di media vuelta y como en una película, la toma regresaba a su velocidad normal más rápida y relajadas , tonto yo, que no me percate bien de su cara, no pues, no era ella. Rayos, que ridículo me debí haber visto. Si hubiera sido un extra me ponía cabe a mi mismo para caer en la realidad. De regreso estaba ya cerca a la mesa donde estaban las chicas, pero sentía un cosquilleo, como si unas hormigas militares caminaran sobre mi pierna. Saque el celular del bolsillo, Oh oh “llamada de mama” ( Si pues le tengo miedo y?)

UPS, no sirvió de nada poner todas esas almohadas bajo la sabana…tenía que contestar la llamada, que se me ocurriría… no lo se. ¿Estudiando un sábado por la noche?, no hay razonamiento verbal ni lógico en ese pretexto. Pero definitivamente sabía que el ruido del bar y la música no ayudarían en nada a mi pellejo al día siguiente. Piensa piensa donde puedes meterte para contestar el incesante vibrar del aparato. Subí al balcón, y todo era igual, bulla por doquier, baje al mini bar lo mismo, ¿Salir? No era buena idea porque el reingreso estaba prohibido al menos que quiera tragarme la cola sin fin. Entonces leí entre humos el letrerito verde parpadeante que decía “salida de emergencia”. ¡Eureka! Empuje el portón y salí a un patio tipo de estacionamiento. Había cero ruidos, tan calmado como la superficie lunar. Conteste el teléfono,    “ si?” “ ah hola (mama) que pasa?” “ que me he salido sin decir nada?... Que hablas?,.. Claro que te dije, pero  estabas hablando por teléfono muy entretenida con tía Angélita, y ni me escuchaste, encima bote la basura de pasada”… “Si ya se, regreso en 20 minutos, estoy  revisando unas separatas y voy… si mama estoy con el carro, ok chau”.

Me sentí como un genio monce (loser). Mi sonrisa malévola dio lugar a un flamante suspiro de tranquilidad. Entonces voltee la cara como quien da la vuelta con una repasada de lugar, y en la terraza de del segundo piso  de aquel  patio había una especie de deposito, en eso mis ojos se abrieron a su máxima expresión, y es que no era porque estaba oscuro o porque vi un fantasma, fue peor... el animal bajaba lentamente y desafiante, con cara de pocos amigos, era un perro negro grande sin cola pero con unos dientes tamaño al equivalente de los dedos de mi mano, del color mas blanco que yo jamás haya visto, acompañados de litros de babas espumosas y gruñidos de infarto, empezó a ladrar. 

Primer acto: retrocedí un paso, siguió ladrando y bajó dos peldaños. 
Segundo acto: mi mano toco la puerta para abrirla, el perro ya estaba casi abajo a unos escasos pasos de mí. 
Tercer acto: la puerta no tenía perilla porque no se abría por fuera…

La bestia estaba furiosa pero por una santa razón desconocida estaba aun distante. Ladraba y ladraba como si yo le hubiera quitado algo, y les juro que no le quite nada!!!, ni un hueso!! es mas que me esculquen!!, no es mi culpa que los perros no tengan bolsillos y por eso no saben donde dejan sus cosas… “ABRAN ABRAN!!” empecé a tocar la lata vieja y media oxidada de la puerta, grité hasta la afonía, el perro bajó completamente las escaleras, y lo tenía frente a mí , esperando que en cualquier momento se trepara a clavar sus  gigantes dientes de sable sobre mí cobarde y temblorosa piel. Empecé a patear el portón y nada, era obvio que nadie iba escucharme con toda la bulla de adentro, estaba perdido era mi fin, nunca en mi vida había gritado “ayúdenme auxilio” y ese día lo hice, no había mas salidas que esa a la vista y tampoco pensaba usar otra si tenia el perro a mi costado esperando su presa.

No había opción, comer o ser comido, pero soy vegetariano, no había forma de escapar, el perro casi se puso en dos patitas para saltar sobre mi, y yo pegado a la puerta con el ultimo golpe y mi cara arrugada de terror. Y repentinamente sucedió, la puerta se abrió, el VIP me miro con cara de pena y risa,  sin explicaciones lo pase de largo y me fui,  y trato de detenerme pero solo dije “tenia que contestar el teléfono, lo siento” y regrese disparado hacia la mesa con la lengua incrédula. Le dije a Rafa que me tenía que ir, y junto a Rosaura se quedaron, mi cara la tenía más blanca que de costumbre, no se dieron cuenta de nada, sin embargo yo me di cuenta de todo. Salí del bar, encendí el auto y en primera choque con un poste, mis nervios aun no estaban completamente en su sitio. Todo paso mientras tenía que pasar. Normalmente uno cuando sale, solo en caso de seguridad lleva un sprite de pimienta o una navaja, en mi caso se podría  decir que la próxima vez tendré que llevar una galleta ricocan o un huesito con harto cloroformo para apaciguar a las bestias. ¡Oh que vida de perros! ¡Que noche de perros! 

#G
Anoche, Gercar lo dijo


lunes, 7 de noviembre de 2011

TE ESPERO SENTADO ROSE


Les voy a contar sobre la última vez que lloré.  “Estaba sentado en la banca de siempre y mas arreglado que si fuera un viernes, sin una cita hecha previamente pero con la sola intención de verte…mis ojos se casan de mirar y mirar y no te asomas por ninguna esquina. Mis manos las guardo porque tengo frio y quisiera encontrarte dentro del bolsillo. Ha pasado más de una hora y media… no has aparecido me falló el instinto… pero es que mi instinto no sabe de amores . Te busco como luz dentro de este cielo… mi cielo mi cielo pobre de mí cielo….”

Calzó perfecta esta canción de 1995 de shakira (nadie la conocía cuando andaba con los pies descalzos)… Poniendole mis propios acordes, gallos de voz con pizca de modificiaciones continue cantando mi propia version:

Cantaba, cantaba y las nubes se volvían negras, precipitaban las aguas bajo el paraguas, y todos los charcos eran de mis llantos, todos los ojos veían mis aguas. Los taxis lustraban toda la autopista, mi boca cerrada hablaba mi mirada, respiraba con mis nervios hechos tallarines fritos sobre tu espera y la casualidad brillaba por su ausencia, mi esperanza me enterraba vivo mi cielo,  pobre de mí cielo….

Los chicles se pegan dentro de mi tráquea,  los globos eran alegres en medio de mi luto, y el fruto de la ausencia no dejaba ni semillas, tus pasos sonaban solo en mis oídos. El sol intentaba asomarse lentamente, mis manos salieron un rato fuera del bolsillo a jugar entre ellas haciendo bullas con los nudillos,  tus pantalones pitillos eran espejismos, mis pestañas caían como hojas de otoño, mis manos con mugre enrojecían mis ojos que intentaban distinguir entre distorsionadas figuras, sombras de viejas y batas de curas. ¿Donde estas? está cerrada  tu camisa turquesa con franqueza me convirtió en daltónico, no veo más rojo ni amarillo. Verde las flores que son hongos en la banca, mis manos renunciaron a sostenerlas en ramo. No has aparecido me falló el instinto, y miro al cielo, mi cielo, pobre de mí cielo.

Mi cabeza era nido de esas pobres aves que emigran a los puntos cardinales, sin intención de limpiarme ni un poco, estoy congelado estoy mojado, resfriado lleno de moco. Pero es que mi paciencia no sabe de errores, mi acierto mas reciente esperarte hasta que colapsen mis sesos. Pero es mi piel quien extraña tus roces, el don de tocarme es lo que la mantiene. Mis bellos se erizan ante cualquier presencia, preguntan por la hora, por la calle, por las puras…. Y quiero suspirar recordándote, alejarlos a todos, limpiar el aire solo para recibirte, porque esta banca y yo somos siameses hasta que llegues con tus hierbas buenas a curarme, porque de tanto dolor me hago añicos, porque siendo grande dentro de tu ausencia me siento chico. El cielo se vuelve morado, el sol se ahoga donde termina el mar, y se despide del cielo, mi cielo, pobre de mí cielo…
                                     
MADONNA - YOU'LL SEE

Los aviones se estrellan por encima de mí, mil astronautas aterrizan a tierra, todos los cigarros  se fueron a la quiebra, mis botella de whiskey suplican una gota de gracia, pero es que mi lengua no sabe de controles,  porque mis dientes mordieron mis uñas a falta de tus mechones. Las llaves aguardan dentro de este abrigo, el sudor de la tarde se volvió frio, me he convertido en una obra de piedra, mil dedos señalan mis ojos heridos, pero es que la gente no sabe de amores, se escriben leyendas sobre mis errores.  Porque mi cielo de día se volvió de noche, y tus tatuajes se escondieron contigo mi cielo, pobre de mí cielo.

La luna se recuesta en menguante cansada de verme, me quito los guantes, mis lunares se volvieron más fuertes, esperando tus labios para que los beses. Te quiero, te quiero,  quédate con mi piel. Se vuelve llena (la luna) cuando te ve en otras partes y media cuando falta mi parte. Pero es que no calculo todos los horarios, mi falta de cordura me vuelve sombrerero, me vendo en esta banca recibiendo limosnas como pordiosero, pero es que mi aspecto esta descuidado, mis barbas raspan por todos los costados, mis canas se vuelven como la nieve que quisiéramos, pero es que se congelan todas mis neuronas,  acordarme de ti calienta mis hormonas.

Muerdo mis labios esperando los tuyos, se hace mas noche, no se oyen murmullos, entre todos los búhos me siento alumbrado, el faro se aleja de mis pasos. La playa se acerca para consolarme, la banca decidió darme tregua solo para mojarme, y recibirte limpio. Pero es que todos mis huesos se hacen polvo, regreso a la banca y la encuentro vacía con asombro, cabeza hueca, soy un cavernícola creyendo en la prehistoria de los finales felices.  Todas tus palabras las tengo en un bolso, salen disparadas cuando te menciono en voz alta, pero es que el viento no sabe de amores, me lleva a las nubes y me deja descender solo sin escalones, las luces son feas en el firmamento porque se acompañan entre ellas y yo debajo calentando mis manos con tan solo mi aliento, mi cielo, mi cielo donde estas mi cielo… te quiero te quiero demonios, pobre de mí cielo.

Salen de la mano, por los caminos de piedra, aquellas parejas que no saben ni mierd_. Yo los contempló por los ángulos de reojo, con solo la envidia en mi mente muerdo el polvo. Las ventanas se llenan de miradas mañosas, jocosas curiosas señalando mi asiento. Pero es que este necio no sabe de errores, mi mejor acierto los globos de colores. Las flores se despabilaron a lo largo del aire. El puente se cae a pedazos y yo aun sigo debajo, esperando sentado, que vuelvas a verme. Me encojo en el hielo de la banca deficiente, me hago enorme de tan solo olerte, pero volteo y no veo ni sombra. Mi cielo que haces porque no te muestras, te fabrico coincidencias y ninguna me pescas, pobre de mí cielo…
Te espero sentado Rose, para decirte “Si, acepto”. 

#G
Anoche, Gercar lo dijo

Fotografía: Gercar PhotograG https://www.facebook.com/gercarphotograg?ref=hl