miércoles, 7 de septiembre de 2011

JUEGA A MIS REGLAS


Las reglas del juego son simples.  Evidentemente soñar hasta que los sueños se hagan realidad no es una buena idea.  Se acuerdan de su último beso? Obviamente no lo creo. Porque cuando besas nunca crees q será el último beso, siempre crees q habrá más.  Nada mejor que lo existencial antes que lo imaginario. Qué diablos se gana idealizando la vida perfecta, ¿Vale la pena? ¿Se volverá realidad algún día de tanto imaginarla? Quizás, pero cuando eso pase  no sería vida seria insania. Difícil de cortar.

A grandes males, grandes remedios; si queremos esta vez elegir y no esperar ser elegido es momento de modificar las leyes del universo que siempre tiene un diseño astrológicamente incomprensible.  Es hora de jugar pero con mis reglas.

Hasta antes de mis 21 el juego era de dos a más jugadores, ahora se limita a solo uno. Stalkers son prescindibles, totalmente prohibidos siempre y cuando en el tablero se me encuentre con una “casualidad”. Juego apto para jóvenes de “22  años en adelante” (y digo 22 porque es mi actual edad).  Aunque la ruleta me puede sorprender con números absurdos,  no quiero estar estar en sube y bajas ridículos.

Es vital leer mi manual de instrucciones, de ese modo  asegurarse de que entre los requisitos se cumpla al menos, el más importante “Jamás permitan que mi cara se transforme en una tristeza”. Y jugar a las escondidas para huir de mi castigo, transformara mi mente de cadentes en una perfecta bestia.

En lo posible recomiendo evitar repartir besos consecutivos, puede volver a adicto a la persona besada. Sabemos que el clima limeño esta tentando nuestros cálidos pensamientos. Aunque nos abriguemos, siempre existen alguien o algo que repentinamente con una palabra nos puede congelar. Siendo así, está permitido.
Se prohíbe los silencios después de un beso entre dos jugadores. Daría por anulada la participación. Sin querer queriendo la soledad se cala entre los espacios minúsculos en formato de frio, es necesario acercarse a la calefacción más cercana…entonces no hay lugar a arrepentimientos.

Se prohíbe como furia en grado superlativo, el  uso de comas al nombrar antecedentes románticos, (pues mientras mayor sea el número de comas, mayor será el número de ex’s). No querrás ver mi poker face, porque con una flor imperial en formato de puño se estamparía en tu cara. Juego de manos, juego de humanos.

El uso de los dados queda autorizado solo para decidir a qué sitio ir. Prohibido usarlos para tomar una decisión sentimental. El participante quedaría automáticamente descalificado. El destino no escoge, sino uno mismo. Hacer uso del piedra, papel o tijera; puede cruzarme los cables.


Usaras tus labios solo para besar los míos. Tus risas para reirte conmigo, tus ojos pueden llorar si solo lloran por mi. 

Soy alérgico a las medias naranjas, pero eso no quita comer mandarinas de vez en cuando. Y es que el camino hacia el cielo es más interesante cuando antes pasas por el hedonismo del infierno. Es una ciencia fascinante. Yo no soy fanático de las opulencias del azar, pero si se trata de un terreno amoroso, es necesario escribir con tinta indeleble y si es posible en negrita: “no seas pegajoso”,  un buen dulce es aquel que no empalaga. Acido al limón y azúcar en polvo.

No te preocupes por el potencial de comprar una “casa” o “avenida”,  no soy interesado. Cose tus bolsillos, no necesito una dolce vita, ya la tengo. Con respecto a los turnos, es relativo. Ambos podemos  jugar, pero solo el uno con el otro. Terceros abstenerse. Se agradece juego limpio a menos que las partes involucrada acuerden lo contrario. Sí “el banco” (la vida) te agarra de su puerquito y te quitara los turnos justo cuando estás en “paseo romántico”, déjala,  ella es  sabia y sabe cuando ponerte en juego. No fuerces.

No lloraras a menos que estés perdiendo mi rastro y para toda tu existencia tener en cuenta las tres R s, respeto a mí, respeto a ti y hacerte responsable de tus actos. No derrames pena cuando estés perdiendo,  eso es un  germen que contamina mi apreciación hacia tu persona. y claro pero claro esta de mas decir que no deben  avanzar las fichas de sus amigos sobre la mía. Amigos que parecen mugre en las uñas, inseparables y prejuiciosos; son mi fobia. No me los impongan.

Si el juego es de más jugadores, los perdedores deberán respetar la decisión  y evitar represalias contra el ganador(a).El juego empieza cuando te cruzaste en mi camino y no harás trampas, a menos que nadie se dé cuenta, y no afecte mi juego, sino al contrario te da puntos a favor. Es tácito. Pero si lograste ganarme con buenas tácticas, merito a tu intelecto.

Quizás estoy siendo pretencioso.. Todos sabemos que muchas veces odiamos adaptarnos a las reglas de otros, lo entiendo. Queremos salirnos con la nuestra. Pero la vida no viene con manual de instrucciones, nosotros lo creamos. Es difícil entender a la persona a la cual decides dedicarle todo.

A comienzos de este año, emprendí una ruta nómada lo cual me llevó a narrar mis diarios de transeúnte distraído por bichos del amor. Felizmente mi cerebro estaba de buen humor cuando construí este otro manual para uso personal. Que si desean pueden practicarlo, pero eso sí, no garantizo resultados inmediatos.

¡Cuidado, advertencia de uso! No se atrevan a jugar con ustedes mismos. Si creen que es necesario úsenla. Si no pueden crear las suyas, estas son mías…

No contaras tus sentimientos a cualquiera.

No alucinar un futuro romántico. Me refiero a tomar un pedazo de situación y crear toda una imagen de algo que puede existir, pero sin fundamentos no corre. No te hagas issues con algo que no ha pasado. Porque te imaginas toda una película,  todo lo que dirás en caso pase algo, y en realidad no es seguro que pase.  Simplemente te preparas tanto para el momento, que te robotizas. Y luego te quedas en corto circuito…. Que fluya.

No dar muchas explicaciones que marean y que nadie te las está pidiendo. Nada peor que hablar porque no sabes de qué hablar. No pienses más de la cuenta. Relaja.

Ser uno mismo, y botar el cuerpo al aire. Que flote.


No envidiar, no ser egoísta. No repartir caras felices con doble significado. Sobre todo cuando la hipocresía te visita.

No mostrar mucha emoción ante cualquiera. Hello!, el entusiasmo en excesos es so high school. No queremos que te vean como el chibolo que escribía en su cuaderno dos nombres unidos por una “y”.
No pasarse de gracioso, está bien que tengas chispa, pero no abuses. Puedes convertir una sonrisa en una raya retorcida…. Catástrofe.

Esta rigurosamente censurado el sedentarismo. Medicina: hacer que cada día cuente, como escribió Leonardo DiCaprio en Titanic. Lpersona que se involucre conmigo deba tener una imaginación incalculable.  Que decida hacer de un día de invierno, un día de sol. Que convierta el sofá en una cueva para invernar viendo maratones de lo que el zapping regale. Que convierta mis salidas en una serie de eventos afortunados. 

Dicen que en la guerra y en el amor todo se vale. Y que siempre los que se llevan la gloria terminan siendo olvidados de la fama. En medio del juego toda regla falla. Quedan anuladas por los impulsos, el rencor, el miedo, la ternura en altos niveles de glucosa y es imposible jugar pensando en cada parámetro, pues si nos desviamos del juego podemos perder todo el recorrido en un soplido, regresar a la casilla de “Go” y sin cobrar los “200”.  En otras veces puedes terminar el juego y sin embargo sentir que no ganaste nada. Otras puede que hayas ganado y no sentir ningún indicio de felicidad, porque todo lo que se fuerza o se obtiene de manera manoseada tiende a activar el karma y te encierra en una cárcel de escarmiento.

 Mientras unos usan los dados, otros usan las cartas. Pero el destino no lee a nadie. Nos pasa a todos la factura al momento de la paga. Nos combina con los demás jugadores solo para hacernos ver que somos parte del juego. Y que las reglas las hace el. 

He perdido muchos turnos teniendo que leer el fatidico game over . Pero no quiero ganar aun, necesito perder varias veces, disciplinarme para enmendar sin señalar culpables. Porque somos lo que somos, jugamos mientras podemos,  nos retiramos cuando debemos, hacemos trampa porque perdemos… es naturaleza humana y no hay regla para evadirla, solo asumirla. Al final nadie está obligado, pero una cosa es segura, mi juego sigue en pie. 


#G
Anoche, Gercar lo dijo

1 comentario:

  1. sobre los amigos q son tu fobia. desgraciadamente, a tus amigos tiene q caerle bien tu pareja o vacilon pq sino fuiste. U_U

    ResponderEliminar

GRACIAS POR COMENTAR